Bellezas Rodantes….Renault 4 L del año 1975
Su dueño es Juan Antonio Fernández

Esta semana traemos a nuestra sección de Bellezas Rodantes a un clásico popular que marcó una época tanto a nivel mundial, nacional y en nuestro pueblo, puesto que fueron muchos los vehículos de esta marca y en concreto este modelo los que circularon por nuestras calles.

Nos referimos al Renault al Renault 4 (conocido popularmente como Cuatro ele, Cuatro latas, R4, en algunos países) es un utilitario producido por el fabricante francés Renault entre los años 1961 y 1992, y originalmente concebido para competir con el Citroen 2 CV.
Una de las unidades que aún las vemos circulando por nuestro municipio es la que tenemos en esta ocasión, un Renault 4 S ( que era el modelo alto en aquellas fechas), matriculado el 23 de septiembre de 1975 y que es propiedad de Juan Antonio Fernández desde el 9 de septiembre del 2020. Juan Antonio nos contó que este coche fue su propietario durante muchos años, José Chica “el villariego”, una persona que siempre tuvo su 4L en perfectas condiciones, restaurando todo lo que le hizo falta para que ahora, con 46 años desde su matriculación, le veamos con su segunda juventud.

Juan Antonio Fernández que hasta su jubilación fue mecánico, nos contaba que en numerosas ocasiones reparó este coche y sabía que estaba en muy buenas condiciones cuando su hija Lucía le dijo hace poco más de un año, que había visto un 4L en venta y que lo iba comprar para regalarselo. Fue una grata noticia puesto que Juan Antonio como hemos dicho, conocía perfectamente el coche y a su dueño, por lo que llegaron a un acuerdo y ahora está en manos de otra familia que seguro lo cuidará tan bien como lo hizo su anterior dueño. Esta unidad fue fabricada en Valladolid y su precio en aquella fecha era CIENTO CUARENTA Y CINCO MIL PESETAS, (870 €).

El Renault 4 L conllevó la audacia de diseñar un vehículo con una filosofía diametralmente opuesta a la hasta entonces seguida por la firma francesa. Se trataba de un vehículo dotado de una mecánica pionera en Renault, con tracción delantera, suspensión a base de barras de torsión, y refrigeración por sistema de circuito cerrado con vaso de expansión. Todo ello comportaba un diseño de carácter estructural muy diferente al de los Renault 4CV y los Renault Dauphine que a la sazón imperaban en la marca. El equipo de diseño capitaneado por Robert Barthaud realizó un esfuerzo considerable para establecer un nuevo concepto de automóvil, apremiado además por la necesidad de alcanzar un ajustado precio de venta, dado el mercado al cual se destinaba. La solución tenía que superar al Citroën 2CV, cuyo éxito era notorio en aquellas fechas.

Frankfurt, 21 de septiembre de 1961. El mundo de la automoción peregrina dirección al Salón Internacional del Automóvil. Es ahí donde Renault presenta el que sería uno de los modelos más famosos de la historia, el llamado ‘R4’, apodado como ‘4L’ y que marcaba toda una revolución para la época. El R4 es el primer sedán familiar que posee cuatro puertas, un gran portón trasero y un espacioso maletero, combinado con un interior modulable. Hace sesenta años inició el concepto estándar de este tipo de vehículos, y aún perdura. El R4, además, fue el primer automóvil de pasajeros con tracción delantera de la marca gala.

Pero para quienes necesitasen más capacidad, Renault siguió la estela de Citroën y desarrolló sobre el chasis del R4 dos furgonetas, la Renault 4F (normal y sobre-elevada) y la Renault 4 F6 (presentada en los ’70) con mayor longitud y distancia entre ejes. Ambas contaban con una práctica e innovadora portezuela sobre el portón trasero que permitía cargar objetos de mayor longitud como tubos y escaleras, solución que con los años acabarían adoptando casi todas las marcas.

Desde un principio se optó por el motor y tracción delanteros, lo que tuvo algunos detractores, ya que sería la primera berlina pequeña de la marca en adoptar esta configuración desde la II Guerra Mundial. Tras barajar muchas posibilidades, finalmente se optó por el motor del Renault 4 CV de 747 c.c., al que se le acopló una caja de cambios de tres relaciones. Con el paso del tiempo la cilindrada y la potencia de este motor fueron aumentando. En 1.962 llegó para completar la gama el Renault 4 Super, con 845 c.c. y en 1.967 la caja de cambios de tres velocidades fue sustituida por una de cuatro relaciones. El motor de 747 c.c. de la versión básica fue creciendo hasta los 782 c.c., para desaparecer en 1.972 al ser sustituido por el motor de 845 c.c. En 1.975, el Renault 4 TL sustiye al Super como tope de gama.

Ya en las últimas versiones se podía optar por el motor de 1.108 c.c. que equipaban modelos más grandes como el Renault 6 o el Renault 8, aunque con la relación de compresión rebajada y tan sólo 38 CV, lo que lo convertía en un motor eterno.
La producción del Renault 4 se detuvo definitivamente EN 1992 tras 8.135.424 unidades. Para su despedida, los galos crearon el modelo ‘Bye-bye’, del que solo se hicieron 1.000 ejemplares.




Dimensiones | |
Largo | 3.655 mm |
Ancho | 1.485 mm |
Alto | 1.532 mm |
Batalla | 2.443 mm (lado izquierdo) 2.395 mm (lado derecho) |
Vía delantera | 1.246 mm |
Vía trasera | 1.204 mm |
Peso | 635 kg |