Un 27 de mayo del año 1995, se inauguraba el Parque del Emigrante, un recinto que venía a complementar la gran zona de ocio y esparcimiento de lo que se denominan “Las Pilas.
Con una superficie de 2300 m2. en unos terrenos del antiguo vivero, las obras comenzaron en 1991, colocándose una placa con motivo de la visita de Juan Barranco, comprovinciano y exalcalde de Madrid además de dos bustos, uno de Blas Infante y otro de Félix Rodríguez de la Fuente, dos kioscos para golosinas, un estanque para peces, una casita para palomas, bancos, alumbrado, una fuente central y los árboles y plantas.
En el corte de la cinta estuvieron el Alcalde Sebastián Moral y su esposa Francisca Moya, la esposa del anterior Alcalde Josefina Casas, el sacerdote Don Martín Jiménez que bendijo las instalaciones, además de la Agrupación Musical “Villa de Mancha Real” dirigida por Juan A. García, que interpretó los himnos de Andalucía y de España y decenas de vecinos que vieron como un solar que había estado abandonado durante años, había sido convertido en un bonito parque de ocio. El coste de la obra fue de 21 millones de pesetas aproximadamente.